México D.F. a 30 de diciembre de 2009
A quien corresponda.
PRESENTE:
Como homosexual, como integrante de la comunidad Lésbica, Gay, Bisexual, Transexual e Intersexual (LGBTI) y como uno de los tantos miembros de la sociedad que apoyamos las reformas al Código Civil y al Código de Procedimientos Civiles del Distrito Federal, para que las personas del mismo sexo podamos casarnos y adoptar hijos, exijo al Secretario de Gobernación, al representante del Ejecutivo Federal y a las instituciones correspondientes, que sancionen a los representantes de los diversos cultos religiosos existentes en nuestro país que se hayan manifestado en contra de las dichas reformas, por ser este un acto que transgrede la laicidad que debe ponderar en el Estado Mexicano, sin mencionar los sentimientos de discriminación y de odio que van implícitos en sus discursos, violando de manera contumaz el artículo primero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, que prohíbe todas las formas de discriminación en nuestro país.
Exijo que se respete la laicidad del Estado, que la iglesia católica y aquellas que la secundan, no se entrometan en las cuestiones que sólo al Estado le incumben, que entiendan que el Estado es laico y que no todos pensamos y creemos como ellos, que se castigue a Norberto Rivera, a Onésimo Cepeda y aquellos otros clérigos que han realizado declaraciones que no hacen más que incitar al odio y la violencia en contra de la comunidad LGBTI.
No esta de más recordar que desde el siglo XVI hasta el siglo XIX en nuestro país, el discurso de la iglesia católica mexicana amparado en la potestad de la santa inquisición inspiro las peores persecuciones en contra de aquellos que no comulgaban con sus ideas; así pues, evitemos caer en el mismo error que pondero nuestra nación durante más de tres siglos y pongamos un limite para que aquellos que desde la fe pretenden tener ingerencia en las decisiones políticas se circunscriban únicamente a su ámbito de competencia y no pretendan establecer sus dogmas por encima de los derechos que la ley civil otorga a los ciudadanos.
Ya basta que la iglesia católica quiera imponer su fe y sus dogmas a toda costa. RESPETO AL ESTADO LAICO
Miguel Salazar Hernández de Cortés Tovar
¡No al aumento de la Tortilla!
¡No al aumento de la gasolina!
¡No al aumento al transporte público!
¡No al aumento de los impuestos!
¡No a la transgresión al Estado laico!
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